El león no se rinde: Juan Faro vuelve tras 101 días entre rejas
El expolicía denuncia una caza personal dentro del cuerpo: “Alguien se colgó la medalla”

Juan Faro ha vuelto. Y no con silencios, sino con un rugido. Tras 101 días en prisión, el exagente convertido en influencer ha reaparecido en televisión para desmontar la versión oficial de su arresto. Lo suyo, según cuenta, no fue justicia, sino un ajuste de cuentas interno.
"Entraron ocho deportivos en la Dirección General solo para detenerme. Aquello parecía Fast & Furious, pero sin delito", ironiza. La clave, según Faro, no fue lo que hizo, sino quién quería hacerse notar. “En la Policía, quien consigue la detención más grande se cuelga la medalla. Esa medalla llevaba mi nombre”, asegura.
¿Su pecado? Coincidir en una cena con ocho personas con antecedentes. Ni viajes, ni negocios, ni nada. Sólo eso bastó para una operación de película… y para enviarlo a prisión provisional. “Después de ver el sumario, queda claro que esto no fue casualidad”, sentencia.
Mientras tanto, el ciudadano honrado ve cómo ocupas, narcos y delincuentes reales pasean con total impunidad. Pero cuando alguien molesta, cuando levanta la voz y no encaja en el relato, entonces sí: sirenas, cámaras, y titulares.
En un país serio, esto se investigaría a fondo. En la España de hoy, se calla. Pero Faro ha hablado. Y la jauría no lo amedrenta.