El régimen islamista de Siria masacra a familias cristianas, drusas y alauitas
España se vende a los terroristas
Un nuevo baño de sangre en Siria: minorías perseguidas y ejecutadas
El régimen islamista de Bashar al-Assad, respaldado por milicias extremistas y grupos radicales, ha llevado a cabo asesinatos en masa contra familias cristianas, drusas y alauitas en distintas regiones de Siria. Los reportes de activistas en el terreno confirman que las ejecuciones sistemáticas han sido dirigidas específicamente contra estas comunidades, consideradas enemigas del régimen o ajenas a la interpretación islamista que buscan imponer.
Limpieza étnica y persecución religiosa
Las denuncias apuntan a que el gobierno de Al-Assad, en alianza con facciones yihadistas, está llevando a cabo una campaña de limpieza étnica y represión brutal contra las minorías religiosas. Los métodos utilizados incluyen:
- Asesinatos colectivos de familias enteras, con especial ensañamiento en aldeas cristianas.
- Ejecuciones extrajudiciales de opositores y disidentes religiosos.
- Destrucción de iglesias, templos drusos y santuarios alauitas como parte de una estrategia para erradicar la presencia de estas comunidades.
- Desplazamientos forzados, dejando a miles de personas sin hogar y empujándolas al exilio.
Silencio internacional ante la barbarie
A pesar de la brutalidad de estos crímenes, la comunidad internacional permanece en gran medida en silencio, sin condenas contundentes ni sanciones efectivas contra el régimen. Mientras que organizaciones de derechos humanos alertan sobre posibles crímenes de guerra y genocidio, los gobiernos occidentales han mostrado tibieza e inacción ante la masacre de cristianos y otras minorías en Siria.
Conclusión
El régimen de Al-Assad y sus aliados islamistas continúan con su política de exterminio, mientras el mundo observa con indiferencia. Si la comunidad internacional no actúa de inmediato, estas minorías corren el riesgo de desaparecer por completo del país. La historia se repite: una vez más, el fanatismo y el totalitarismo religioso siembran el terror en Oriente Medio, sin que nadie levante la voz para detener la barbarie.