Los Ángeles declara el toque de queda y la Policía realiza "arrestos masivos"
Mientras el gobernador de Texas anuncia también el despliegue de la Guardia Nacional

La ciudad de Los Ángeles ha declarado un toque de queda tras una jornada de intensas protestas que derivaron en disturbios y enfrentamientos con las fuerzas del orden.
La Policía angelina ha llevado a cabo "arrestos masivos", según fuentes oficiales, en un intento por restablecer el orden en varios puntos de la ciudad donde se han registrado saqueos, incendios y bloqueos de carreteras.
En paralelo, el gobernador de Texas, Greg Abbott, ha anunciado el despliegue de la Guardia Nacional en varios condados del estado, anticipando posibles disturbios similares.
"Estamos preparados para responder con todos los recursos necesarios", declaró Abbott, aludiendo a la necesidad de mantener la seguridad ante posibles actos de violencia.
Las protestas, inicialmente pacíficas, se han intensificado tras varios incidentes de uso excesivo de la fuerza por parte de la Policía, lo que ha encendido la indignación social.
Organizaciones civiles han criticado la respuesta oficial, denunciando un uso desproporcionado de la fuerza y advirtiendo sobre la criminalización del derecho a la protesta.
Por su parte, el alcalde de Los Ángeles ha solicitado calma a la población y ha asegurado que el toque de queda es una medida temporal para "proteger vidas y propiedades".
Mientras tanto, los líderes comunitarios y activistas piden diálogo y reformas estructurales, insistiendo en que la represión solo agravará el conflicto.