La industria farmacéutica ‘obedece’ a Donald Trump y comienza a hacer inversiones en EEUU

Las principales compañías del sector farmacéutico han comenzado a reubicar parte de su producción en Estados Unidos, respondiendo así a la presión ejercida por el expresidente Donald Trump, quien ha advertido con la imposición de nuevos aranceles a productos extranjeros.
Esta estrategia busca incentivar la manufactura nacional y reducir la dependencia de países como China o India en la cadena de suministro de medicamentos.
Empresas como Pfizer, Johnson & Johnson o Moderna han anunciado planes millonarios de inversión para levantar nuevas plantas en suelo estadounidense.
Trump celebró el movimiento como una victoria de su política económica, destacando que “por fin las multinacionales están escuchando al pueblo americano”.
Los analistas advierten que, aunque esta tendencia pueda beneficiar a la economía local, también podría encarecer los medicamentos a corto plazo.